sábado, 26 de marzo de 2016


      Queridos hijos, que la alegría de la Resurrección de Mi Hijo esté en sus corazones. Vístanse a través de la oración, de la Luz del Resucitado. Que el Espíritu Santo llene sus almas a través de la Gracia de los Sacramentos, de la Adoración Eucarística, para que vivan unidos al Sagrado Corazón de Mi Hijo y encuentren la verdadera Paz.

Reconozcan en Mi Hijo Resucitado el origen de la Vida. A Él, hijos Míos, deben volver. No aparten su vista de la Luz de Jesús Resucitado. Hacia Él deben caminar. Con Mi intercesión, con la de los Santos y de los Ángeles, serán ayudados y fortalecidos para seguir siempre con ánimo y con esperanza a la Luz de Jesús.

      Yo les amo y les bendigo .  Que la alegría de Jesús Resucitado y la fuerza de su Amor se quede en sus pequeños corazones. Gracias por haber recibido Mi Llamamiento al Amor. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.