jueves, 22 de octubre de 2015



“No han escuchado, rechazando mi mensaje”

La apostasía, querido hijo, ha entrado en el Santuario, en la Iglesia, llenando de tinieblas las casas de mi Hijo. Muchos pastores de la Iglesia caminan a su objetivo, modernizar la Iglesia, cambiar la doctrina por otra que sea complaciente con la inmoralidad y el pecado, haciendo que muchas almas se condenen por no vivir el Evangelio.

Querido hijo, la revelación que hago es para tu corazón, pero a través de ti, para el mundo, especialmente es un llamado para la Iglesia, mis palabras maternas no han sido obedecidas, sino puestas en juicio y algunas condenadas.
Muchos pretenden hacer una Iglesia a su manera, no a la manera del Evangelio, he venido como misionera obedeciendo a mi Hijo en la Cruz: he ahí a tu hijo.

Queridos hijos mi única preocupación materna es que sean fieles a la Voz del Buen Pastor, porque guiados por su Voz podrán encontrar la plenitud de la verdad y el amor, pero mis hijos no han escuchado, han obedecido la voz de la razón humana y no la Voz mística y silenciosa del Espíritu Santo, que guía a la Iglesia no solo a través de los sacerdotes que deben ser los primeros en guiar, pero también lo hace a través de sus profetas, pues la Iglesia es sacerdotal, pero el demonio la ha tentado para que olvide su sentido profético.

Hijo, mi Hijo os anuncio que a pesar de la prueba más grande nunca les dejaría solos, la escritura enseña a la Iglesia lo que debían hacer para seguir fieles al mandato de Jesús y como muchos corazones lo han olvidado el Señor me envía solamente a hacer  lo que mi Hijo les dijo.

Vengo en busca de la salvación de la Iglesia de Jesucristo agobiada por la confusión, la soberbia, la competencia de puestos y se han olvidado que el objetivo de ser de la Iglesia es la salvación de las almas.

Hijito como no me han escuchado, van muchos, la mitad de este pueblo a un gran abismo, por querer realizar sus proyectos humanos en una institución divina.

Hijito ora porque la apostasía toma su puesto en esta lucha y ha comenzado a destruir muchas almas, oren para que puedan discernir las señales que mi Hijo os transmite y envía a través de Mi.

LA IGLESIA ESTÁ COMENZANDO A SER AZOTADA.

Hijito sufro mucho porque me han rechazado, han tenido muy poca fe y sin  luz de la fe se han dejado confundir. Ora por todos los pastores que están siendo probados.

Te amo y te bendigo.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu 
Santo. Amén.


Ave María Purísima, sin pecado concebida.