sábado, 4 de junio de 2016



Queridos hijos, cuando ustedes oran con amor y con fe, Mi Sagrado Corazón es consolado por todas las ofensas y pecados que cometen los hombres.

Hijitos, les llamo a la conversión y a la adoración eucarística. No me dejen solo en el Sagrario, vivan de Mi Corazón-Eucaristía.
Hijitos, Mi Sagrado Corazón es la imagen del Amor que se entrega, del Amor crucificado, del Amor que muere, pero de un Amor que también resucita.


Hijitos, amen Mi Sagrado Corazón, no tengan miedo de seguirme en vuestra vida de consagrados a los Dos Corazones.
Les amo y les bendigo. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.